domingo, 29 de julio de 2007

Canción de la semana (29/7 – 5/8)

Esta semana voy a poner una versión de una canción de los Guns N’ Roses. La canción es “Sweet Child of Mine”. Quien la versiona es Sheryl Crow.

La cantante de Blues con ojos azules, como la llaman en Estados Unidos, tiene una voz privilegiada y en esta canción lo demuestra. La versión no desmerece en absoluto a la original.

Espero que os guste y que disfrutéis esta canción.

Orgullo

Mañana, lunes 30 de Julio de 2007 será un día muy importante para mi. Un día que espero con ilusión. Mañana tengo una cita, junto con mi amigo Manolo, para hacernos abonados del Atlético de Madrid.

Para alguien que no viva el fútbol con pasión, pagar dinero por ir al fútbol, pudiendo verlo por la tele no tiene sentido. Para alguien que no sea seguidor del Atlético de Madrid, abonarse a un club que da más penas que alegrías a su afición es incomprensible. Para alguien a quien no le guste el fútbol, pagar casi 300 € por ir a sufrir con tu equipo una vez cada dos semanas es poco menos que una locura. Para mi es una gran ilusión y un orgullo.

Significa un sueño que tengo desde que era pequeño. Porque como buen atlético, lo soy desde siempre, desde que recuerdo, desde que supe lo que era el fútbol el deporte y la pasión por unos colores y un escudo.

Para mi la afición del Atlético de Madrid es distinta en un aspecto. Nos gusta que el equipo gane, como a todas las aficiones, pero en los peores momentos del equipo, la afición se vuelca. Esto se pudo comprobar cuando el equipo bajo a segunda división. Ese año hubo más abonados que nunca, y es que es una afición distinta. A pesar de que el equipo no da demasiadas ocasiones para la alegría, la afición no baja y cada vez hay más abonados.

Ahora bien. Yo soy un aficionado con memoria. El Atlético de Madrid es un club histórico en España y en Europa. Por afición y por títulos es el tercero de España y debemos sentirnos orgullosos de ello. Ayer asistí a un partido que significó la victoria de una eliminatoria de la Intertoto o lo que es lo mismo, la clasificación para la UEFA siete años después. Lo que para otros equipos podría ser motivo de fiesta, para nosotros debe ser sólo un respiro. No es concebible una celebración en Neptuno de algo que no debe ser más que un objetivo mínimo. Como tampoco entendí la celebración por el ascenso a primera división tras los dos años de vergüenza en la división de plata.

El caso es que finalmente el equipo jugará en UEFA y yo lo veré y espero que me hagan sentirme orgulloso de mi club y que la ilusión que he tenido desde niño se culmine con una gran temporada.

sábado, 14 de julio de 2007

Cerrado por vacaciones

Lamento mucho comunicaros, habituales del blog, que este va a estar dos semanitas sin novedades. La verdad es que no lo lamento demasiado ya que el motivo es que estoy de vacaciones en Malaga en la playita y concretamente en el chiringuito, jejeje...


Hablando del chiringuito, la canción de la semana esta vez es una típica de este periodo estival: El chiringuito de Georgie Dann.

Parece mentira, pero me ha costado bastante encontrar esta canción y el video que está puesto es una soberana tontería, pero podeis poner la música, cerrar los ojos y imaginaros en la playa tomando una cervecita a orillas del mar.

Felices Vacaciones a Todos!!!!

miércoles, 4 de julio de 2007

Canción de la semana (2 – 8 Julio)

La canción de esta semana es un homenaje a una legendaria banda de los años 70 que nos dejó huellas imborrables en nuestra memoria musical: Led Zeppelin.



Una de ellas está de nuevo de moda por formar parte de la banda sonora de una de las películas más taquilleras del cine en estos momentos. Se trata de Shrek 3 y la canción es: The immigrant song. La historia del ogro más conocido del mundo, se nutre de buena música desde las primeras películas y en este caso no iba a ser menos.


Espero que disfrutéis de esta maravillosa canción y si no conocéis la discografía de Led Zeppelín, esta canción os acerque a ella.

Adiós y suerte.

Fernando Torres se va. Lo que para la mayoría de la gente no significa nada del otro mundo, para un atlético de toda la vida como yo, significa el final de algo. No sabría explicar de que, porque desde luego una época llena de éxitos no ha sido. En los años que ha estado Torres en el primer equipo el único pequeño motivo para sonreír fue el ascenso y la verdad más que una sonrisa se trataba de una mueca de alivio y vergüenza por haber estado dos años en segunda división.

Lo cierto es que lo que se acaba es una ilusión. La ilusión de ver como este equipo, mi equipo, quería volver a ser lo que fue. Un grande en España y un fijo en Europa. Y quería hacerlo comandados por un chico de la cantera del equipo de toda la vida, y eso hacía que todos nos viésemos un poco reflejados en él. Era la ilusión de los chavales de los equipos de abajo y el camino a seguir.

Lo cierto es que es de lo poco salvable del equipo en los últimos años. Fernando Torres, prácticamente solo ha estado a punto de llevar al equipo a Europa y con todo el peso del escudo que llevaba en el pecho, incluso con la capitanía a cuestas los últimos años. Esa capacidad de asumir la responsabilidad junto con sus condiciones físicas y técnicas hicieron que en seguida equipos europeos se fijasen en él. Aquí en España, el Barcelona, en Italia el Milán y sobre todo en Inglaterra donde su tipo de juego va como anillo al dedo, intentaron ficharle.


Todos estos equipos a buen seguro que ofrecieron cantidades más que aceptables para club y jugador. Pero Torres tenía un sueño. Quería volver a Europa con el Atleti, con su Atleti, con mi Atleti. Pero el sólo no podía. Necesitaba un equipo y ahí entraba la directiva. Pero la directiva nunca le dio lo que pedía, y el equipo año tras año se quedaba fuera de las competiciones europeas.

Éste año todo apuntaba a que esa mala racha se iba a terminar. El Atlético de Madrid estuvo prácticamente toda la temporada en puestos de UEFA, pero a falta de 4 jornadas perdió en casa 0-6 ante el Barça y a falta de 2 perdió 2-3 ante el Celta que era penúltimo y terminó bajando a segunda división.

La paciencia de Torres se acabó. Su amor por los colores está fuera de toda duda, pero aquí no ve el futuro que soñó de niño. “El niño” se va al Liverpool. Allí será “The Kid” y jugará la champions, una competición que merece jugar Torres. Aquí nadie de la directiva tiene la poca vergüenza de pedirle que se quede. Han tenido tiempo de sobra para retenerle y no lo han hecho. La afición no puede hacer otra cosa que desearle suerte y a ver si allí puedes demostrar lo que vales, que aquí ya lo sabemos. Suerte y Hasta pronto.

domingo, 24 de junio de 2007

Canción de la semana (25 de Junio a 1 de Julio)

Esta semana os voy a enseñar una rareza. Se trata de la canción The four horsemen del grupo: Aphrodite’s Child.

Posiblemente no os diga nada de pronto. Tampoco me lo dijo a mi cuando leí en el blog de Todo Conciertos que era uno de los mejores solos de guitarra de la historia en opinión de mi amigo Manolo. La confianza que tengo en su criterio y la curiosidad hicieron que buscase la canción e información acerca del grupo.

La canción me sorprendió muy favorablemente. Una canción de pop psicodélico muy propia de su época a principios de los años 70.

Cuando empecé a encontrar información del grupo surgieron nombres que conocía pero no en ese contexto. Sobre todo el cantante y el teclista eran dos primos que conocía de sobra: Demmis Roussos y Vangelis Papathanassiou.

Si se trataba de un grupo griego donde el cantante de “Triki triki” y el compositor de Carros de fuego daban aquí sus primeros pasos en el mundo de la música.

Esta canción pertenece al último y mejor disco del grupo “666” del año 1972 basado en el Apocalipsis de San Juan.
Espero que os guste y gracias Manolo por enseñarme esta perla.

Draft 2007

En la madrugada del jueves al viernes a las 2:30 de la madrugada española comenzará la elección de los jugadores novatos para la temporada 2007/2008 en la NBA, es lo que en Estados Unidos llaman: el Draft.

Ya se celebró el sorteo para saber el orden de elección de los equipos que peor quedaron en la temporada anterior. Se trata de un sorteo en el que los equipos que peor quedaron en la temporada pasada tienen más posibilidades de conseguir un número alto de elección. El peor equipo (Memphis Grizzlies) tenía el 25% de posibilidades de conseguir el número uno, pero el sorteo fue caprichoso y esa suerte correspondió a Pórtland. Los Blazers además cuentan con Brandon Roy, el rookie de este año y con Lamarcus Aldridge y Sergio Rodríguez que son otros dos jugadores jóvenes con mucha proyección.

Memphis tuvo que conformarse con la cuarta opción, por lo que con toda probabilidad se van a quedar sin ninguno de los dos jugadores más deseados del Draft: Greg Oden y Kevin Durant.

Además a los españoles nos interesa en gran medida por la posible elección de dos jugadores nuestros: Rudy Fernández y Marc Gasol.

Parece que van a ser elegidos en primera ronda pero no en lugares demasiado altos. En una página especializada en el Draft de la NBA: http://www.nbadraft.net/ colocan a Rudy en el puesto 18 elegido por Golden State y a Gasol en el puesto 28 elegido por los campeones San Antonio Spurs.

Hay más jugadores que podrían ir a la liga americana aunque ya no por el Draft. Juan Carlos Navarro y Felipe Reyes (Flamante MVP de la final de la ACB) están más que preparados para jugar allí.
Habrá que estar muy atentos porque esa noche se decidirán los Shaquille O’Neal, Lebron James y Tim Duncan del futuro.

domingo, 17 de junio de 2007

Canción de la semana (18 - 24 junio)

La primera canción de la semana es "On my mind" de los Sunday drivers.

Este grupo toledano creado en 1999 lleva cuatro discos publicados, todos ellos en ingles. Este tema es del tercer trabajo llamado "Little hearts attacks". Esta canción en concreto aparece en la banda sonora de la película "Penelope" protagonizada por Christina Ricci y Reese Witherspoon.

Más recientemente han publicado un nuevo trabajo (The tiny telephone) donde se encuentra la canción "Do it" que se puede escuchar en un anuncio de cerveza light.

sábado, 16 de junio de 2007

4 – 0 Por partida doble

¿Alguien puede decir que es una sorpresa que los San Antonio Spurs hayan ganado el anillo?

Cualquiera que haya visto la NBA en los últimos años habrá observado que hay un equipo que siempre realiza buenas temporadas regulares y que siempre llega a los playoffs entre el grupo de favoritos, y en cuatro de esos años también ganan.

Si, está claro que el tipo de juego de San Antonio no enamora, y que no es de los equipos que crean afición y que la gente no suele quedarse hasta las tres de la mañana para ver a los Spurs, pero no creo que sus aficionados tengan ninguna queja al respecto.

San Antonio es el producto de un buen trabajo, buenas decisiones y esa pizca de suerte necesaria para cualquier tipo de empresa del calibre que significa construir un equipo campeón.

La pizca de suerte llegó en el verano de 1997 cuando ayudados por su mala posición en la temporada anterior recibieron el número 1 en la lotería del Draft. El regalo era un chico alto delgado y tremendamente tímido de Las Islas Vírgenes que había realizado una muy buena temporada en la Universidad de Wake Forest, su nombre: Tim Duncan. En un año en el que había jugadores mucho más explosivos como Tracy McGrady o Chauncey Billups, se quedaron con un jugador que podía formar una gran pareja interior con su gran estrella del momento, El Almirante David Robinson. Duncan no tardó en demostrar que no se habían equivocado con él. Rookie del año y en su segundo año San Antonio consigue su primer título de campeones de la NBA en la historia de la franquicia. Por supuesto el MVP de la final fue Tim Duncan. Fue una temporada extraña, con muy pocos partidos en la temporada regular por la huelga de los jugadores y con una bajada tremenda en las audiencias provocada sobre todo por el efecto de la retirada de Michael Jordan el año anterior. Phil Jackson llamó a ese anillo “El del asterisco” y a San Antonio no se le reconoció como a un campeón igual que a los demás.

Precisamente Phil Jackson capitaneó a Los Angeles Lakers que de la mano de Shaquille O’Neal y de Kobe Bryant ganaron tres títulos consecutivos de 2000 a 2002. Casi nadie se acordaba ya de San Antonio y eso que en 2001 llegaron a la final de la conferencia oeste cayendo 4 – 0 contra los Lakers.

Llega el año 2003 y comienza con un partido en el Staples Center de Los Angeles que enfrenta a los tricampeones Lakers frente a los Spurs. En San Antonio hay bastantes cambios respecto al equipo campeón de 1999. Llama la atención la cantidad de jugadores no americanos que tienen. Duncan de las Islas Vírgenes, Nesterovic Esloveno, Un joven base francés de la promoción de Gasol (Tony Parker) y un novato argentino que llegaba a la NBA después de haberlo ganado todo con la Virtus de Bolonia en Europa, Manu Ginobili. En aquel partido no estaba O’Neal por lesión y ganaron los Spurs. Podía parecer casualidad pero se volvieron a encontrar en los playoffs con factor cancha a favor de San Antonio y estos eliminaron a los vigentes campeones por 4 – 2. Llegaron a la final y ganaron por el mismo resultado a los Nets de New Jersey. Duncan volvió a ser el MVP de la final. Segundo título. En una liga completa. Sin asterisco.

Después de este año, David Robinson se retiró y se separaron las torres gemelas. Duncan parecía capaz de mantener en un buen nivel a los Spurs pero, ¿podrían volver a optar al anillo?

Si por algo se ha caracterizado San Antonio es por saber elegir a los compañeros de Duncan en su búsqueda de más y más títulos. El banquillo de los Spurs siempre ha estado bien surtido de jugadores con experiencia que no daban problemas y si soluciones. Steve Kerr, Nick Van Exel, Robert Horry, Brent Barry, etc han ocupado el banquillo de San Antonio sabiendo que es el camino más cercano al título.

Greg Popovic es uno de los entrenadores más criticados a lo largo de su carrera porque el juego de San Antonio no gusta. Él se preguntará, ¿Y a quien le importa? Desde luego a él no.

Popovic utiliza a jugadores que no tendrían cabida en casi ningún equipo de la NBA ni en muchos de Europa. Los convierte en especialistas. El gran ejemplo el Bruce Bowen. Bowen en un defensor empalagoso, sucio, molesto y por lo tanto perfecto. Lo cierto es que nadie quiere ver en frente a este hombre en defensa y por algo será.

Alguien que hace algo similar en sus equipos es Larry Brown. Fue entrenador de Detroit durante las tempoadas 2004 y 2005. En su primer año hizo campeones a los Pistons en una final tremenda antes los Lakers de los 4 magníficos. En 2005 llegó a la final y se encontró a los Spurs. La final de 2005 no se caracterizó por el buen juego ni por la espectacularidad de sus jugadores, pero en intensidad e igualdad fue la mejor final de los últimos años. Finalmente los Spurs se impusieron por 4-3 y Duncan fue por tercera vez MVP de las finales ante su compañero de promoción Chauncey Billups que lo había sido el año anterior.

Los Spurs han ido creciendo y mejorando. En 2006 cayeron en semifinales de conferencia ante Dallas y en 2007 llegaron a los playoffs como un equipo con posibilidades pero no favorito. Al menos no tanto como Dallas, Phoenix o Detroit. Después de pasar la primera ronda sin mayores problemas (4-1 a Denver) se encontraron con Phoenix en semifinales de conferencia. Los Suns eran los favoritos de prensa y público por su juego rápido y atacante manejado por el base canadiense Steve Nash. Se esperaba un choque de estilos, pero San Antonio sorprendió a todos. En el primer partido en Phoenix, Tony Parker realizó un espectacular partido superando a Steve Nash en todos los aspectos y poniendo el factor cancha a favor de ellos. En el cuarto partido Phoenix empató a 2 y recuperó el factor cancha pero una pelea provocada por Robert Horry hizo que cayera una sanción de un partido a dos de los jugadores más importantes de los Suns: Amare Stoudemire y Boris Diaw. San Antonio ganó el quinto partido en Phoenix gracias a un triple de Bowen y cerró la serie en el sexto.

Podrán decir que se aprovecharon de la pelea del cuarto partido para pasar ronda, pero ellos dirán que esas cosas también se aprenden y a los Suns no le habrá venido mal la lección.

En la final de conferencia volvieron a pasar por encima de sus rivales (4-1 a Utah) y en la final se encontraron con los sorprendentes Cavaliers de Cleveland de Lebron James, Motivo de la primera entrada de este blog.

Si a los Suns les faltaba alguna lección que aprender, a los Cavs alguna más. San Antonio no tuvo piedad y arrasó a cleveland por 4-0 con Tony Parker de MVP y con la ayuda inestimable de Duncan y de Ginobili.
La cuarta final a la que llegan y el cuarto anillo. Otro 4-0 que apuntar a su favor. 1999, 2003, 2005 y 2007, todos años impares. En 2009 habrá que estar muy pendientes de ellos, aunque el año que viene yo no les quitaría el ojo de encima por si acaso.

miércoles, 13 de junio de 2007

¡NOVEDADES!

Con el fin de mantener un interés diario del blog, sigo añadiendo distintas secciones que se irán actualizando cada poco tiempo. Ya están los paneles de noticias y el sudoku diario. Ahora incorporo la “Canción de la semana”. Todos los domingos pondré una canción en el margen derecho que haya escuchado esta semana o que haya recordado de hace tiempo y me guste o me diga algo. Por supuesto se admiten sugerencias, aunque la última palabra la tendré yo.

A parte de estas secciones del margen derecho, continuaré publicando las entradas que se ven en la parte central como hasta ahora. Cuando finalice la final de la NBA merecerá un poco de espacio sin duda.

Quisiera dar la enhorabuena a Manolito que ha entrado en este mundo de los blogs con unas entradas más que interesantes. Si quereis leerlo está en http://todoconciertos.blogspot.com/.
Mucha suerte y te seguiremos de cerca.

Espero que sigáis encontrando interesante el blog y que lo sigáis visitando. Gracias y un saludo a todos.


Freebird.

domingo, 10 de junio de 2007

Las canciones de los anuncios.

Vivimos en un mundo en que la publicidad está en prácticamente todo lo que nos rodea. Sobre todo en los países del primer mundo, donde el dinero lo mueve todo, las compañías de todo tipo, se dan a conocer en todo tipo de eventos. Compañías de móviles que patrocinan conciertos, Bancos que aparecen en los coches de formula 1 y hasta yogures que pueden patrocinar el apartado deportivo de algún telediario.

Tanta publicidad satura al posible receptor. En medios tan seguidos como la radio y sobre todo la televisión, los publicistas cada vez buscan ideas más llamativas para captar la atención de sus objetivos. Ahora con tantos canales y el mando a distancia, el zapping está a la orden del día y sobre todo a la hora de los anuncios. Cuando antes valía un anuncio mediocre porque al verlo 40 veces el mensaje calaba en el espectador, ahora con una o dos veces tiene que haber dejado algún poso.

Una forma de llamar la atención de los espectadores a un anuncio, son sus canciones. Como si de una banda sonora de una película se tratara, las canciones de los anuncios proporcionan una envoltura atractiva al producto y los encamina al determinado sector de la población hacia el que va dirigido el mismo.

Este hecho hace que salgan beneficiados varios sectores. Los músicos, tanto los nuevos como los consagrados e incluso los olvidados se benefician de este tipo de publicidad impagable que les mete de lleno en las casas de millones de personas, la mayoría de las cuales no escucha habitualmente música en la radio o ve canales de televisión dedicados a la música. Todos recordamos el anuncio de ducados hace unos años con la música de “La flaca”. Jarabe de palo era hasta entonces un grupo desconocido y sin ese anuncio nunca habrían tenido el impacto tan grande que tuvieron aunque la canción era igual de buena si no hubiese salido en aquel anuncio.

A continuación propongo unas cuantas canciones de conocidos anuncios entre los que tenemos grupos que no son muy conocidos por el gran publico como Jet o Spoon, grupos que hace tiempo que no se escuchaban como Simple Minds o Lynyrd Skynyrd (una debilidad mía) y grandes estrellas consagradas como Shakira.



Shakira. Pure intution





Dandy Warhols. Bohemian like you





Jet. Are you gone be my girl





Lynyrd Skynyrd. Simple Man





White Stripes. Seven nation army





Simple Minds. Don’t you (Forget about me)





Spoon. I turn my camera on


jueves, 7 de junio de 2007

Segundas partes nunca fueron buenas. ¿Y las terceras?

Sufrimos un ataque de cine de baja calidad últimamente en nuestros cines. Entre esto, los precios de las entradas y que se pueden bajar las películas por Internet, hacen que la gente no vaya al cine y que los empresarios, dueños de las salas, con el visto bueno de algunos alcaldes, piensen en cerrar los cines de toda la vida para dejar solo los de los centros comerciales, convirtiéndolos en meros cebos para picar en las tiendas de alrededor.

Centrándonos en el problema de la falta de ideas en el cine (teatro y televisión tampoco se libran) esta claro que lo único que lleva a la gente al cine, son los remakes de películas o series antiguas o las secuelas de las pocas buenas películas que se realizan. Hace tiempo se decía que las segundas partes nunca eran buenas, pero ahora nos topamos de frente con las terceras. Xmen, Spiderman, Piratas del Caribe y próximamente Shrek.

Personalmente ya he visto la tercera parte de Spiderman y de Piratas del Caribe y he de decir que si bien la primera era lo esperado (tampoco esperaba mucho más que los efectos especiales), la segunda si fue bastante decepcionante. Acudí a verla con muchas ganas después de haber disfrutado de las dos primeras películas de la saga. En este caso la segunda parte si respondió a lo que se esperaba de ella. Tenía todo lo que se busca de una típica película de aventuras: acción, romance y sobre todo humor. Jack Sparrow se convirtió en el personaje preferido de la película, a pesar de que la pareja protagonista era la formada por Orlando Bloom y Keira Knightley. El humor del personaje interpretado por Johnny Deep se llevó de calle a la gente que vio la película. Precisamente si algo no debía faltar en la tercera entrega era este humor. La ironía con la que Jack se burlaba de todo lo que le rodeaba, incluso enfrentándose a la muerte. Pues faltó. La película presenta unos escenarios maravillosos, unas escenas de batallas bastante logradas, el tira y afloja de la pareja protagonista ya cansa un poco pero tenía que estar, pero ¿y el humor? Se quedó en algún comentario gracioso y con cuentagotas. Conclusión: película entretenida pero muy lejos de sus dos predecesoras; sus dos horas y pico de duración se hicieron largas, muy largas...

Grandes sagas de películas han bajado de calidad en la tercera parte. Una de las más conocidas como es “El Padrino” bajó el nivel altísimo de las dos primeras, aunque si que consiguió dar un final verosímil a la historia. Otra gran película como Matrix, ridiculizó a su primera parte y a sus seguidores con las dos siguientes que ni los propios creadores entendieron. Pero como todo en la vida, siempre hay excepciones. En la primera trilogía de Star Wars, “El retorno del Jedi” estaba al nivel de las otras dos o mejor y en “El señor de los anillos” a la ultima entrega “El retorno del Rey” le pasaba lo mismo. La característica común de estas dos sagas es que desde un principio se idearon así y no se hicieron segunda o tercera películas después de ver el éxito de la primera.

Está claro que estamos ante una crisis del cine de entretenimiento. Nosotros consumimos ese tipo de cine preferiblemente de Estados Unidos ya que aquí en España y en general en Europa no existe la tradición, o la cultura, o las ganas de realizar este tipo de cine.

¿Y el cine español.......?

Parece que ahora con algunas grandes producciones, como Alatriste, se está entrando en ese mercado, viendo sobre todo que lo que viene del otro lado del Atlántico no es de mucha calidad. Sería importante que se aprovechase esa circunstancia para captar al público en las salas de cine, y de ese modo subir los beneficios con las entradas.

El problema es la falta de una apuesta clara por este tipo de cine. Quizá de menor calidad respecto a lo intelectual, pero que recoge más beneficios. Vemos como los más conocidos actores de Hollywood trabajan alternando películas taquilleras con lo que allí llaman cine independiente. De ese modo, mantienen la cuenta corriente más que saneada y por otro lado cumplen sus deseos profesionales realizando los papeles que más les llenan.

Parece que el cine español tiene “miedo” a embarcarse en proyectos de gran envergadura porque hasta ahora no ha habido ni productores dispuestos a hacer esa inversión, ni directores con valentía para dirigirlos. Pero hemos empezado a romper esa pared que nos separa del cine norteamericano con películas como Alatriste o incluso Los Borgia, ofreciéndonos cine de entretenimiento, con calidad y de grandes presupuestos (comparado con lo que estamos acostumbrados). Porque no nos olvidemos que el cine, a parte de ser cultura y entretenimiento, también es negocio y en España hay poco negocio de cine español. Tenemos que valorar lo que tenemos, apostar por nuestra cultura que es muy rica y mostrarla al mundo, ¿o es que sólo los norteamericanos son capaces de hacer buenas películas, denominadas con cierto desprecio por muchos, comerciales?. La comercialidad es lo que da dinero y éste es necesario para poder seguir haciendo más producciones y también así promocionar a nuestros actores y directores.

Creo que El Laberinto del Fauno es un buen ejemplo, siendo una producción hispano-mejicana, la mayoría del elenco estaba compuesto por actores españoles, muy buenos, y ha conseguido ganar unos cuantos oscar, que no está nada mal.
Así que creo que tenemos que seguir apostando por el buen cine en general, incluyendo el comercial, que también lo hay bueno y en especial por el español ya que tiene mucho que ofrecer y bastante que aportar a la cultura cinematográfica mundial.

martes, 5 de junio de 2007

¿Por qué el gol de Maradona es y será recordado como el mejor de la historia?






Si al ver y escuchar este video no se te ponen los pelos de punta, solo puede ser por dos motivos. O bien no te gusta el fútbol, o bien eres inglés.

A lo largo de la historia hemos podido disfrutar de numerosos goles extraordinarios, sobre todo aquí en España a donde vienen a jugar los mejores jugadores del mundo. Son inolvidable goles como los de Ronaldo al Compostela, o el de Messi al Getafe. En los mundiales, se han visto también grandes goles. Recuerdo uno de un jugador árabe (Owairan) a Bélgica, que por su belleza plástica se podía asemejar al del astro argentino.

La diferencia entre estos goles, y el de Maradona, reside en el momento en el que se produjo y en las especiales circunstancias políticas que vivían los dos países que se enfrentaban aquél día.

Pongámonos en situación. Año 1986 y Argentina que todavía no se había recuperado de una cruel dictadura, acababa de perder la guerra de las Malvinas contra Gran Bretaña. Margaret Thatcher no había tenido piedad con los argentinos y había enviado a sus mejores tropas humillando a un inferior ejército argentino. Posiblemente se tratase de uno de los momentos más bajos de los argentinos en su autoestima como nación.

Llega el mundial y la diosa fortuna y el buen hacer de las dos selecciones hasta ese momento, hacen que se encuentren Argentina e Inglaterra en los cuartos de final. Aquí no hay tanques. No hay portaaviones ni soldados. Aquí tampoco hay ventaja de ninguno de los dos. Once contra once en el campo y un país detrás de cada equipo.

La Inglaterra de Glenn Hoddle, de Peter Shilton y de Gary Lineker que llegaba como maximo goleador con 5 goles empatado con Butrageño. La Argentina de Ruggeri, de Pumpido, de Burruchaga y sobre todo de Maradona. Maradona era considerado como el mejor jugador del momento y actualmente es considerado por muchos (entre los que me incluyo) el mejor de la historia. En ese momento estaba ante la oportunidad de demostrar a su país y al mundo esa condición.

El partido empezó como se esperaba. Cuartos de final. Mucha tensión y poco fútbol. Sólo una falta directa lanzada por Maradona y que dio en el palo provocó nervios en la grada.

Llega el segundo tiempo y en el minuto 51 la jugada más polémica de la historia de los mundiales (junto con el gol fantasma de Inglaterra a Alemania en la final de 1966), la mano de Dios.

Una penetración del ex volante de Boca Juniors, Barcelona FC y Nápoli, entre otros, por el centro de la defensa inglesa culminó con un intento de pared con Jorge Valdano. La devolución de la pelota por parte de este último fue a parar a los pies de Steve Hodge, cuyo despeje fallido hizo que el balón saliera despedido hacia arriba. Sin darse por vencido ni en las causas más perdidas, Maradona continuó su carrera para saltar y propinó un puñetazo al balón con la mano izquierda para desviarlo por encima de Shilton, que había salido a buscar el esférico (1-0). Los jugadores ingleses protestaron en vano ante el colegiado tunecino Ali Bennaceur, que concedió el gol convencido de que Maradona había tocado el balón con la cabeza. ¡Increíble!

Maradona sabía que todo el mundo había visto por la tele que el gol no había sido legal. No era la forma de derrotar al enemigo inglés. No habían pasado 5 minutos cuando el Pelusa recuperó el balón en su propio campo, se desembarazó de Beardsley y de Peter Reid, y se adentró en territorio inglés. Los 115,000 espectadores del estadio Azteca se quedaron pasmados mientras Maradona avanzaba hacia la meta regateando primero a Butcher, luego a Fenwick, y por último a Shilton para obrar el 2-0. Fue la obra maestra de un genio del fútbol. Se le llamó “El gol del siglo”.

El golazo de Maradona fue acompañado por el vibrante relato del uruguayo Victor Hugo Morales que, a través de Radio Argentina, fue capaz de entregar toda la magia que Maradona regalaba en la cancha.

El relato es tan genial como el gol:

“…la va a tocar para Diego, ahí la tiene Maradona, lo marcan dos, pisa la pelota Maradona, arranca por la derecha el genio del futbol mundial, y deja el tercero y va a tocar para Burruchaga... ¡Siempre Maradona!

¡Genio! ¡Genio! ¡Genio! ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta... y Goooooool... Gooooool... ¡Espectacular! ¡Viva el fútbol! ¡Golazo! ¡Diegol! ¡Maradona! Estoy emocionado, perdónenme ustedes... Maradona, en una corrida memorable, en la jugada de todos los tiempos... barrilete cósmico... ¿de qué planeta veniste? Para dejar en el camino a tanto inglés, para que el país con el puño apretado, gritando por Argentina... Argentina 2 - Inglaterra 0... Diegol, Diegol, Diego Armando Maradona... Gracias Dios por el fútbol, por Maradona, por estas lágrimas, por este Argentina 2 - Inglaterra 0…”.

El partido quedó muerto. El postrero gol de Lineker solo sirvió para que terminase siendo el máximo goleador del mundial de México, pero la historia ya estaba escrita. Se le llamó el gol del siglo y se dice que es el mejor de la historia de los mundiales. Quizá vaya todo más allá. Sobre todo porque Argentina terminó ganando aquel mundial y, al menos por unos días hizo olvidar a los argentinos su situación y les dio un motivo para sentirse orgullosos de serlo. Muy orgullosos. Más de lo que cualquier gol ha hecho sentirse a cualquier país jamás y por ello es en mi opinión el mejor gol de la historia.

domingo, 3 de junio de 2007

El nuevo 23

Anota 48 puntos, los últimos 25 de su equipo, hace que su equipo gane en la inexpugnable pista de los Pistons de Detroit después de dos prorrogas en un quinto partido de las series finales de la conferencia este con empate a dos... y lleva el número 23. A todos se nos viene un nombre a la cabeza, pero cuando añadimos que estamos en el año 2007 Michael Jordan ya no nos cuadra, y es que hay un nuevo 23 que aunque no nos hace olvidar al de hace 10 años, si nos hace recordarle. Su nombre es Lebron James, y el pasado jueves realizó una de esas hazañas que se recuerdan con el tiempo. James estuvo al nivel de los más grandes de la historia, sobre todo porque lo hizo en unas circunstancias de presión y de responsabilidad extremas, porque si no lo hacía él, no lo iba a hacer nadie.

Para entender un poco mejor la importancia de esta gesta, debemos estudiar en que contexto se encuentra. Lebron James juega en los Cleveland Cavaliers. Este equipo era el peor equipo de la NBA en el año 2003. La lotería del Draft les dio la oportunidad de elegir en primer lugar a que jugador querían en uno de las mejores generaciones de jugadores de los últimos 20 años. Ese año llegaron a la liga jugadores tan imprescindibles, como Carmelo Anthony, Dwyane Wade o Chris Bosh, todos ellos All Stars. El comienzo para Lebron, fue más complicado que para sus compañeros de promoción. Tanto Anthony como Wade entraron en Playoffs en su primer año mientras que James debía “conformarse” con ser el rookie del año sin regalar un solo trofeo mensual. Mucho se criticó a James cuando se les escaparon a los Cavs los playoffs en la última jornada de la liga regular, gracias a un final trepidante de los Nets que les ganaron la octava plaza por la mano. Se dijo entonces que Lebron era un producto de marketing, pero en un mundo tan influenciado por las estadísticas como la NBA, nuestro nuevo 23 respondió con un triple doble en ese último partido definitivo.
La temporada 2004-05 fue la tercera de Lebron James en la NBA. La temporada comenzó con una mala noticia. Carlos Boozer, el único apoyo de James en los Cavs, era traspasado a Utah y en su lugar no llegó nadie de su nivel. Los dirigentes de Cleveland pensaron que un sophmore de Memphis como Drew Gooden podía hacer ese papel, pero el tiempo ha demostrado que no ha sido así. Ante esta situación, Lebron multiplicó sus labores en el equipo, y demostró que prácticamente sólo era capaz de llevar a los Cavs a los Playoffs. Después de una temporada de fábula (MVP del All Stars incluido) pudo por fin cumplir con el cometido que mucha gente, pero sobre todo él mismo se había impuesto. No sólo eso, sino que además entraron en cuarto lugar por lo que tenía el factor cancha a favor. Sus rivales en esa primera ronda, los complicados Wizards de Gilbert Arenas. Llegaba la hora de ver de que pasta estaba hecho este chico y de lo que era capaz en los partidos de post temporada. Lebron dejó que sus números hablasen por él. Logró 32 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias, y lo más importante para James, 1-0 para Cleveland. Parece claro que no se equivocaban en Sports Illustrated cuando estando aún en el instituto le llamaban ya "El Elegido". Los Cavs terminaron logrando la clasificación (4-2) y se encontraron con los que eran los campeones del Este los dos años anteriores y los campeones de la NBA en 2004, Detroit Pistons.
Los Cavs, consiguieron forzar a los Pistons hasta el séptimo partido, y aunque cayeron eliminados, la capacidad de Lebron y sus Cavs estaba ya fuera de toda duda.

Y llegamos a ésta temporada 2006-2007 donde nos encontramos. Todo el año hemos estado escuchando que el MVP de la temporada podía ir a Dirk Nowizki, Steve Nash ó a Kobe Bryant. Efectivamente, estos han sido los jugadores más destacados de la temporada regular, pero eso es algo que a Lebron ya no le importaba demasiado. Los Cavaliers despacio y sin demasiado ruido se iban colocando entre los primeros puestos de la conferencia Este. Tras un apretado final, consiguen quedar en segunda posición tras los omnipresentes Pistons, pero superando a temibles rivales como los Bulls o los actuales campeones, los Heat. Después de superar con relativa facilidad de los Wizards y los Nets, llegaron a la final de la conferencia Este frente, como no, a los Pistons.

Diecisiete años han pasado desde que Michael Jordan llevó a sus Bulls a las finales del Este ante, ¡También los Pistons!. Pero aquellos Bulls estaban llenos de grandes jugadores. Si juntamos a Jordan con Lebron, ¿quién es comparable a Pippen en los Cavs? Nadie en absoluto. ¿Y con Horace Grant? Drew Gooden no, desde luego. Carlos Boozer si lo habría sido. Sólo salen ganando en la comparación entre los pivots con Ilgauskas y quizá Larry Hughes esté al nivel de su par John Paxon.

Y la eliminatoria llega por fin al partido que nos ocupa. Quinto partido, en Detroit y eliminatoria empatada. Curiosamente Lebron llega cuestionado. No porque no esté a buen nivel, sino porque no está al nivel de “El Elegido” como siempre se le ha pedido desde que tenía 17 años. A falta de 6 minutos James llevaba 23 puntos y el partido estaba igualado. El brasileño Varejao anotó una bandeja y a partir de entonces, todas las miradas en ataque se dirigieron siempre hacia el 23. James contestó de la manera que se esperaba de él. Anotó los últimos 25 puntos de su equipo con acciones de todo tipo: bandejas, tripes, tiros libres, etc. El partido terminó empatado, y la prorroga también finalizó empatado a 100 puntos. En la segunda prorroga, Detroit llegó a ponerse 107 a 104 a falta de poco más de un minuto. James contestó con un triple estratosférico y una bandeja mal defendida por Detroit, como Jordan ante Utah en el 98, como Magic ante Boston en el 87, en definitiva, como los más grandes.

Y así se escribe la historia, en el sexto partido en Cleveland, James se quedó en 20 puntos, pero salió un reserva novato (Gibson) que anotó 31 puntos, pero los 14 rebotes y las 8 asistencias de James no fueron superadas por nadie y sobre todo Cleveland ganó 98-82 y se proclama campeón de la conferencia Este y entra por primera vez en su historia en la final de la NBA.
No sabemos que va a pasar en las series finales, San Antonio es favorito, pero lo que si sabemos es que Lebron James estará a la altura de lo que se espera de él, a la altura de “El Elegido”.